La luz de María

“Igual que Velázquez, Mari empezó oscura y acabó luminosa. Más que los detalles, captaba la luz, el alma de las cosas” decía Antonio López haciendo referencia a la manera de pintar de su mujer. María Moreno, artista reconocida, maestra del realismo aunque sus obras parecen formar en ocasiones parte del mundo de la imaginación. Mujer apasionada de la literatura, sintió desde muy joven vocación por las artes y se formó en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde ingresó en 1954, para cursar los estudios de Bellas Artes, especializándose en pintura. Allí se enamoró de un joven Antonio López, con el que acabaría casándose unos años después y compartiría su vida con él.

Vivir cerca de tal genio debió de ser maravilloso, compartir con él, aprender de él, admirar al artista y amarlo tan de cerca fue un auténtico privilegio. Y duele que alguien pueda pensar que ella vivió a su sombra o que nunca pudo triunfar por culpa de Antonio López, qué poca visión, tan falta de luz.

María Moreno  expuso individualmente en tres ocasiones a lo largo de su carrera. La primera, en 1966 en la Galería Edurne, en 1973 en Frankfurt, en la galería Herbert Meyer-Ellinger. Y la última en 1990 en París, en la galería de Claude Bernard, galerista parisino que  trabajó con Freud, con Bacon y con Giacometti, y que en aquellos momentos compró toda su obra, pues el galerista francés la conoció y quiso que ella expusiera en su sala de París. Cuenta el propio Bernard que “ella no quería exponer, era feliz en su mundo”. En este aspecto coinciden todas las fuentes: ella nunca quiso figurar socialmente, pintaba porque le gustaba. Algo que muy poca gente es capaz de entender, incluso de creer. Pues sí, María Moreno debió de ser feliz, pinto cómo quiso, fue una maestra de la luz, del realismo del alma, tuvo dos hijas con Antonio López y produjo la película documental “El Sol del membrillo”, una inmersión en el proceso creativo de su marido rodada por Víctor Erice. Dicen que Antonio López quería pintar el sol, y ella hizo todo lo posible por ayudarle a lograrlo. Amor en estado puro.